📰 Caramelo: El ganador de “La Casa de los Famosos” que protege a su familia del ojo público

Nueva York se convirtió en el trampolín que cambió para siempre la vida de Carlos Antonio Cruz, mejor conocido como Caramelo. Lo que empezó como un trabajo de repartidor de paquetes en Manhattan y una presencia carismática en redes sociales, lo llevó a conquistar la televisión hispana: se coronó campeón de La Casa de los Famosos All‑Stars, la primera edición que ganó un hombre, y se llevó el premio de 200 mil dólares . Pero en medio de la fama y los flashes, hay una decisión firme que lo diferencia: mantener a sus tres hijos lejos del ojo público.

Una historia de humildad y sacrificio

Originario de Dajabón, República Dominicana, Caramelo emigró a Nueva York con 18 años, enfrentando trabajos difíciles como carnicero, recolector de metales y conductor en UPS. Su personalidad directa, sin máscaras, y su capacidad para conectar con la gente lo hicieron viral, hasta que fue invitado a programas como The Jennifer Hudson Show. Pero él no lo olvida: “Nadie me va a tirar mi orgullo al suelo, porque sé lo que he pasado”

Campeón real sin puesta en escena

Dentro de la casa más famosa de Telemundo, Caramelo se mostró como era: auténtico, sin estrategias o personajes falsos, y conectado emocionalmente con el público. Esa naturalidad fue clave para conquistar al televidente y convencerlos de otorgarle el triunfo . Después de 119 días, su carisma y transparencia lo coronaron como ganador indiscutible

El corazón dividido: fama y family

Tras ganar el reality el 2 de junio, su vida dio un giro de 180 grados. Giras, eventos, entrevistas… Caramelo vio crecer su fama de forma meteórica . Pero entre el torbellino mediático, aún no ha podido reunirse con sus tres hijos —dos biológicos y una hija de crianza—, quienes se han mantenido completamente fuera de los reflectores

Cuando le preguntaron cuándo los vería, respondió con voz alegre pero seria: “Estoy esperando el momento para verlos, abrazarlos, besarlos… Salí a hacer esto por ellos, porque quiero lo mejor para ellos” . Y al hablar de su novia y compañera “Manelyk”, dijo que “cuando llegue el momento” les los presentará, confiado en que ella “es bien amable, bien bacana”

¿Por qué protegerlos del espectáculo?

En entrevista con People en Español, explicó: “No los expongo porque puede afectarlos como niños. Quiero que, cuando ellos decidan usar redes o mostrarse, lo hagan por elección. Yo no quiero exhibirlos al mundo”. Esa postura revela su profundo sentido de responsabilidad como padre, consciente del impacto que la exposición mediática puede tener en sus vidas.

Su hermano, Félix Cruz, también habló para En casa con Telemundo, describiéndolo como “responsable, trabajador, incansable cuando juega con sus hijos”. Esa ternura familiar contrasta con la imagen pública del influencer y campeón, mostrando un hombre que valora más los momentos simples con su familia que los focos.

Balancear el éxito y la intimidad

Para Caramelo, ser el primer hombre en ganar el reality fue un logro histórico. Sin embargo, su prioridad ahora se enfoca en un equilibrio: disfrutar su éxito profesional sin sacrificar la privacidad de su familia. Él deja claro que el escenario y los protagonistas no incluyen a sus hijos… todavía.

Con millones de seguidores pidiendo ver más de su vida, él responde con humildad: no es momento. Quiere que sus hijos tomen las riendas de qué quieren mostrar cuando sean mayores, sin presiones ni manipulación. Esa postura ya ha generado admiración y respeto tanto en redes como entre sus colegas.