Turki Alalshikh estalla contra la pelea Canelo Álvarez vs Williams Scull: “No quiero más Tom y Jerry”

El mundo del boxeo se encuentra nuevamente en el ojo del huracán tras las polémicas declaraciones de Turki Alalshikh, presidente de la Autoridad General de Entretenimiento de Arabia Saudita y principal impulsor de los grandes eventos de boxeo en Riad. Esta vez, el blanco de su frustración ha sido el combate entre el mexicano Saúl “Canelo” Álvarez y el cubano Williams Scull, celebrado en mayo pasado en la capital saudí.

Un combate que dejó mucho que desear

La pelea, que tenía como objetivo principal devolverle a Canelo el título indiscutido de peso supermediano para luego exponerlo ante Terence Crawford, terminó siendo una decepción para los fanáticos y, especialmente, para Alalshikh. Según datos de CompuBox, fue uno de los combates con menos golpes conectados en la historia reciente, lo que generó críticas sobre el estilo de pelea de Scull, quien pasó la mayor parte del tiempo moviéndose por el ring y evitando el intercambio directo.

“No quiero ver más peleas estilo Tom y Jerry, donde un boxeador corre por el ring y el otro lo persigue”, declaró Alalshikh con evidente molestia. “No podemos seguir apoyando este tipo de combates con Riyadh Season y The Ring. Queremos apoyar a boxeadores que lo den todo en el ring y peleen con corazón y orgullo”.

El reto de mantener la calidad en Riad

La declaración del jeque no pasó desapercibida en la comunidad boxística internacional. Desde su llegada al mundo del boxeo, Alalshikh ha sido el artífice de algunos de los combates más esperados y espectaculares, como Usyk vs Fury y Bivol vs Beterbiev. Sin embargo, no todos los eventos han estado a la altura de las expectativas, como lo demostró la reciente derrota de Ryan García ante Rollie Romero en Nueva York, o la victoria poco llamativa de Devin Haney.

El jeque ha dejado claro que solo está dispuesto a invertir en peleas que garanticen espectáculo y emoción, y que no tolerará más combates aburridos que pongan en riesgo la reputación de Riyadh como nueva capital mundial del boxeo.

El nuevo gran reto: Canelo Álvarez vs Terence Crawford

A pesar de la decepción con Scull, Alalshikh ya tiene la mirada puesta en su próximo gran proyecto: el enfrentamiento entre Canelo Álvarez y Terence Crawford, programado para el 13 de septiembre en el Allegiant Stadium de Las Vegas, casa de los Raiders de la NFL. Esta pelea será transmitida a nivel mundial por Netflix y se perfila como uno de los eventos más lucrativos y mediáticos del año.

Sin embargo, la diferencia de peso entre ambos pugilistas —más de dos divisiones— ha generado dudas entre los expertos y aficionados. Mientras Canelo ha dominado la categoría de los supermedianos, Crawford ha brillado en divisiones inferiores y su salto de peso representa un reto monumental.

Una apuesta millonaria

Alalshikh no ha escatimado recursos ni estrategias para vender este combate como “la pelea más grande de la historia”, haciendo uso incluso de figuras como Dana White, presidente de la UFC, para aumentar el interés global. El objetivo es claro: consolidar a Arabia Saudita y sus socios como los nuevos reyes del boxeo mundial, desplazando a Las Vegas y Nueva York como los epicentros tradicionales del deporte.

“Queremos peleas que hagan historia, no simples exhibiciones”, insistió el jeque. “El boxeo debe ser un espectáculo donde los mejores se enfrenten sin miedo, donde cada golpe cuente y donde el público sienta la emoción en cada asalto”.

El futuro del boxeo en juego

La reacción de Turki Alalshikh ha puesto sobre la mesa un debate urgente sobre el rumbo del boxeo profesional. ¿Deben los promotores priorizar el espectáculo sobre la táctica? ¿Hasta qué punto es válido exigir a los boxeadores que arriesguen más por el entretenimiento?

Por ahora, todas las miradas están puestas en el duelo entre Canelo y Crawford. Un combate que, más allá de los cinturones y el dinero, podría definir el futuro del boxeo de élite y marcar el inicio de una nueva era donde el espectáculo y la pasión sean la única regla.